BBZ es un término utilizado en la jerga juvenil para referirse a una persona que se destaca por su estilo único y auténtico. Esta abreviación proviene de la expresión “bad boy/z”, que se traduce como “chico malo/z”. Sin embargo, en la actualidad, su significado ha evolucionado para abarcar a cualquier individuo que se caracterice por ser original, rebelde y seguro de sí mismo. Ser un BBZ es sinónimo de ser auténtico y no seguir las normas establecidas por la sociedad. Es una forma de expresar una actitud desafiante y fuera de lo común, que a menudo se refleja en la forma de vestir, hablar y actuar. En resumen, ser un BBZ es ser único, atrevido y no tener miedo de ser diferente.