El calentamiento de la dirección IP es un proceso que consiste en aumentar gradualmente la reputación de una dirección IP para mejorar su capacidad de entrega de correos electrónicos y evitar ser marcada como spam. Al igual que un atleta se prepara y calienta antes de una competencia, una dirección IP necesita ser “calentada” para garantizar una comunicación efectiva y exitosa con los servidores de correo electrónico. Este proceso implica una serie de acciones estratégicas, como el envío de correos electrónicos a una lista de contactos pequeña y de confianza, la interacción con los destinatarios y la implementación de buenas prácticas de seguridad en línea. En resumen, el calentamiento de la dirección IP es esencial para establecer una sólida reputación en línea y asegurar que tus mensajes lleguen a la bandeja de entrada de tus destinatarios.