Una estrategia de comunicación malintencionada que busca difamar o desprestigiar a una persona, empresa o grupo, a través de la difusión de información falsa o manipulada. Esta táctica puede ser utilizada con fines políticos, comerciales o personales, y su objetivo es dañar la reputación y la imagen pública de su objetivo. La campaña denigratoria se caracteriza por su carácter difamatorio y su intención de generar desconfianza y rechazo en la audiencia hacia el sujeto atacado.