La demanda real se refiere a la cantidad de bienes y servicios que los consumidores están dispuestos y tienen la capacidad de adquirir en un determinado mercado. A diferencia de la demanda potencial, la demanda real se basa en la realidad y no en supuestos teóricos, ya que tiene en cuenta factores como el poder adquisitivo y las preferencias de los consumidores. Es un indicador clave para las empresas y gobiernos, ya que les permite tomar decisiones estratégicas y económicas basadas en las necesidades y comportamientos reales de los consumidores. En resumen, la demanda real es la fuerza impulsora detrás de la oferta y la demanda en una economía, y su comprensión es esencial para el éxito en el mundo de los negocios.