La entrevista semiestructurada es una técnica de investigación que combina la flexibilidad de una conversación informal con la rigurosidad de un cuestionario estructurado. En ella, el entrevistador plantea preguntas abiertas y permite al entrevistado expresarse libremente, pero también sigue una guía de temas y preguntas predefinidas para asegurar la obtención de información relevante y coherente. Esta metodología permite una mayor profundidad en la exploración de un tema, al mismo tiempo que mantiene cierto grado de control y organización en la recopilación de datos. Es ampliamente utilizada en estudios cualitativos y en la investigación social, ya que permite una comprensión más completa y detallada de las experiencias y perspectivas de los participantes. En resumen, la entrevista semiestructurada es una herramienta valiosa para obtener información rica y significativa, a través de una interacción dinámica y fluida entre el entrevistador y el entrevistado.