El poder molesto de los consumidores se refiere a la capacidad de los clientes de influir en las decisiones y acciones de las empresas mediante sus quejas, críticas y demandas. Este poder surge de la importancia que tienen los consumidores en el mercado y su capacidad de afectar la reputación y el éxito de una empresa. A través de las redes sociales y otras plataformas, los consumidores pueden expresar su descontento y exigir cambios, lo que obliga a las empresas a prestar atención y responder de manera adecuada para mantener su lealtad y satisfacción. En resumen, el poder molesto de los consumidores es una fuerza a tener en cuenta en el mundo empresarial actual, ya que puede ser una herramienta poderosa para impulsar cambios y mejorar la calidad de los productos y servicios ofrecidos.