Una estrategia publicitaria que busca impactar y sorprender al espectador mediante el uso de imágenes, mensajes o situaciones extremas, con el fin de llamar su atención y generar una reacción emocional intensa. Esta técnica busca romper con lo convencional y provocar un impacto duradero en la mente del consumidor, con el objetivo de generar una mayor recordación de la marca o producto promocionado. Sin embargo, su uso debe ser cuidadoso y ético, ya que puede generar controversia y reacciones negativas en la audiencia.